Aunque hace días que se filtraron los títulos de ópera, no ha sido hasta hoy que el Teatro de la Maestranza ha hecho pública su temporada 2013-2014. Pues bien, he aquí mis impresiones.
En lo que atañe a la ópera, la cosa se mantiene en la cifra, algo baja para mí, de cuatro títulos. Cosas de los tiempos que corren. Es de sobra sabido que el Maestranza se ve gravemente afectado por los recortes de las administraciones públicas, y resulta obvio que el teatro busca ofrecer títulos populares capaces de garantizar el lleno. El caso es que muchos ven esto como algo negativo, y francamente servidor no acaba de estar de acuerdo. Desearía, por supuesto, que los títulos de ópera fuesen más, ¿pero qué hay de malo en tirar de los clásicos en los tiempos que corren? En lo personal, me considero un melómano de mente abierta a la hora de descubrir nuevas obras, pero siendo totalmente honesto, la inmensa mayoría de lo que escucho son esos títulos “de siempre”. Si voy a ir cuatro días a la ópera, ¿por qué quejarme entonces?
Me encantaría ver ópera barroca de nuevo bien escenificada en Sevilla. Me encantaría que hubiese un número mayor de títulos y más variedad, pero personalmente no me quejo. Si una temporada de ópera tiene que constar de cuatro títulos, Aida, La Cenicienta, Manon Lescaut y el Ocaso me parecen fabulosos. En serio, ¿qué hay de malo? Parece como si en Sevilla no hubiese habido nunca interés por arriesgar con títulos poco explotados, lo cual es más que falso. Sólo hay que mirar las programaciones de las temporadas anteriores para darse cuenta de que hace años que el Maestranza busca aportar algo novedoso junto a lo tradicional. Me refiero a Šárka, Thaïs, Turandot (Busoni), Cristóbal Colón...
Es curioso. Cuando se tira de títulos inhabituales se critica el desplazamiento que experimentan los tradicionales (Mortier), y cuando se opta por lo de siempre, falta imaginación. Yo no soy ni pro-Halffter ni anti-Halffter, por lo que mi opinión no busca intencionadamente ensalzar el trabajo de nadie ni echarlo por tierra. Simplemente, comprendo que con la que nos está cayendo, no es mal planteamiento ofrecer títulos populares. Así de sencillo. Y todavía digo más: hace mucho que no se ven en Sevilla un Trovatore, un Otello, un Nabucco, una Carmen, un Barbero... Si se pueden compatibilizar con propuestas menos populares, mejor que mejor, pero que una temporada se componga aisladamente de títulos tradicionales no me parece motivo de queja. No para mí.
En cuanto a los repartos, soy de los que prefieren no decir nada hasta el día mismo de la función para evitar acudir con prejuicios. Para mí es lo más sano si quiero disfrutar. Pero hay cosas curiosas: Tamara Wilson como Aida, o el siempre estimable Carlos Chausson en La Cenerentola. La Manon Lescaut de Arteta es una incógnita para mí. No he pasado de escucharla cantando el “Sola, perduta” en recitales y no sé cómo resultará. Sólo hay que esperar.
En cuanto a danza, otro de los ciclos que me interesan, tenemos al Ballet Nacional de Cuba con Giselle y Coppélia y al de Kiev con El lago de los cisnes. Es curioso, desde luego, lo de Giselle, que se ha visto esta misma temporada en el Maestranza. También se programaron los cisnes hace no muchos años, pero no seré yo quien le ponga pegas a algo tan bueno. Si voy a disfrutar, y pienso hacerlo, prefiero tener la integridad de no despotricar absurdamente.
Los recitales líricos corren a cargo de Nancy Fabiola Herrera y José Bros, y la GRAN sorpresa para mí ha sido el ciclo de piano:
GRACIAS, GRACIAS Y GRACIAS.
Tenemos a dos grandísimas figuras esta próxima temporada frente al piano. Una, un veterano. La otra, una joven proeza. De Christian Zacharias no es necesario decir nada. En cuanto a Yuja Wang, ¿qué añadir a lo que ya he escrito en este blog? Esa chica menuda, de estilo tan desenfadado, no es ninguna joven promesa. Es una PIANISTA, con mayúsculas. Y teniendo en cuenta que ha dicho que próximamente piensa tirarse un año sabático en el que no va hacer “ni sudokus” (palabras textuales), no hay que desaprovechar la oportunidad. Me encanta que este tipo de artistas, a los que por alguna razón imaginamos serios y distantes, se muestren tan naturales y cercanos. Me encanta Yuja Wang.
Así que en mi opinión, y es sólo una opinión subjetiva y discutible, como siempre digo, la próxima temporada pinta agradable. Y lo digo por la razón más honesta que se me ocurre: porque creo que puedo disfrutar con ella. ¿Podría ser más innovadora? Claro. Pero eso no quita que lo que va a verse esté mal.
A decir verdad, la única pega que yo sí le pondría podría resumirse en tres letras: la “O”, la “B” y la “S”. Es una lástima no encontrar a la Orquesta Barroca de Sevilla en ningún espectáculo. Un conjunto de semejante calidad merece, desde luego, actuar aunque sea un único día al año en el principal teatro musical de la ciudad. Afortunadamente, la OBS cuenta con su propio programa de abono y a buen seguro no nos faltarán a los sevillanos oportunidades para disfrutar de ella, pero es una lástima. Ojalá que vuelva a reincorporarse a las próximas temporadas.
Otro aspecto que, en mi modesta opinión, debería considerarse por parte de la dirección del Teatro es el de los precios de las butacas, y concretamente, las de paraíso. El Maestranza no es un teatro caro... para los que quieran y puedan permitirse sentarse en el patio de butacas. Actualmente, ir a la ópera en Sevilla viene a salir como poco por unos cincuenta euros aproximadamente. Quizá no fuese mala idea encarecer lo caro y abaratar lo barato. Me explico: si alguien está dispuesto a gastarse en torno a cien pavos para sentarse en el patio, tal vez llegar a los ciento cincuenta no suponga un salto tan grande... y si lo supone, puede escoger localidades más baratas. En cambio, conozco de primera mano a gente joven que ha dejado de asistir porque el dichoso paraíso es caro. Es curioso que los veinte euros que separan a una entrada de treinta euros de una de cincuenta puedan suponer un salto más significativo que los que separan a una de cien de otra de ciento veinte.
5 comentarios:
Me gusta la próxima temporada del Maestranza.El complemente perfecto hubiera sido una ópera barroca...estaré muy pendiente de este teatro.In cluso me estoy animando para Don Giavanni, para quitarme el amargor de la que vimos en el Real.
Hoy en el auditorio las sinfonías de Beethoven desde las 12 de la mañana hasta las 12 de la noche.Me han gustado todas, pero especialmente la 3ª, la 5ª,la 7ª y como no la "madre" de las sinfonías ..la 9ª.LOPEZ COBOS,(le pongo con mayúsculas) ha estado GRANDIOSO.Recordaré este día hasta el último aliento de mi vida y encima que tío mas honesto y humilde en este mundo lleno de "divos"...bueno muchos se creen que lo son...
Un saludo
Me alegro, porque por lo que leo en internet parece que la temporada no ha tenido buena acogida por aquí.
Como le decía el otro día a alguien, el Maestranza está enfermo por los recortes en su financiación, y con los enfermos es preferible estar apoyándoles que ponerse a gritarles que se van a morir. Parece que hay gente que pone más pasión en criticar los efectos de la falta de apoyo económico que esa propia falta de apoyo.
Comprendo que los que busquen una temporada llena de "primeras estrellas de la ópera" no van a encontrarla en Sevilla, pero eso no quiere decir que las funciones no puedan funcionar. Y francamente, no creo que nadie se crea que la cosa está como para llamar a Garança y a Flórez a que nos canten "La Cenicienta".
Si la temporada no funciona yo lo diré cuando proceda, que es cuando llegue a su término y tenga conocimiento de causa.
Qué envidia lo de esas sinfonías de Beethoven...
Por cierto, no tenemos "Don Giovanni" esta próxima temporada en Sevilla. El último que vimos por aquí fue en la temporada 08/09 con una horrenda puesta en escena de Mario Gas.
Tienes razón Pablo no es Don Giovanni, es Rigoletto, es que estuvimos hablando ayer del horroroso Don Giovanni que nos tuvimos que "tragar" en el Real y después de las 9 sinfonias de Beethoven, creo que la mente me jugó una mala pasada.Cuenta por favor si la has visto,que te ha parecido Rigoletto.
Efectivamente no me gusta hablar de lo mala que va a ser una temporada hasta que se vea.Además el traer grandes divos no garantiza nada.Hace un año justo, en Las Palmas, tuve la ocasión de ver a Flórez en Los Pescadores de Perlas y a mi entender y el de varias personas mas...estuvo horrendo.
Vuelvo a repetir, los españoles nos quejamos por todo...vamos a dar tiempo al tiempo y como dices tú... cuidar al enfermo.
Un saludo.
Voy a la última función de Rigoletto, el día 29. En general parece que están teniendo críticas muy positivas los dos repartos. Pinta muy bien.
Gracias por la información Pablo.Solamente por ver y oír a Leo Nucci...seguro que merece la pena.
Después de el maravilloso día de las sinfonías de Beethoven, solo se habla hoy de que se abucheó a la Reina... !!de verdad, que que pena!!.Luego nos quejamos que los niños crean que Beethoven es un perro que sale en una película...
Un saludo
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